jueves, 22 de marzo de 2012

Enseñanzas de Juan Larrea.

Sólo puedo decir que la imperfección es la mejor aliada para que surja la emoción. Cómo todo, aplicable a todos los ámbitos de la vida; aquí os dejo lo que otro de mis amigos surrealistas me ha dejado con gran sabor de boca hoy, en una de mis sesiones intensas de lecturas, pensamientos y algún que otro verso.


"No queremos correr el riesgo de creer en la perfección, noción mortífera y estancadora, y de tender hacia ella en vez de creer en la evolución progresiva. No existe la perfección como no existe la verdad ni la belleza y ésta menos que para nadie para el artista. No existen obras bellas y eternas sino humildemente obras que en un tiempo emocionan, unas a un puñado de hombres, otras a otro. Un hombre sólo puede proferir: esto me gusta. Y sintiéndose dichoso exento y sin miedo ante la vida y la muerte, ni añade ni resta a su goce la opinión colectiva. Hablo del hombre valeroso de sí mismo y de su ignorancia y cuya serenidad inteligente posee la suficiente fuerza para neutralizar ensortijado del rebaño. Él sabe que su complejo personal carece de otro modelo que el que le da el espejo de su potencia. Para él, ante una obra de espíritu no cuenta más que su emoción, es decir, su imperfección, su movimiento."

miércoles, 21 de marzo de 2012

Día de la poesía.

No podía ser menos que no escribiera en mi blog este día tan señalado para la literatura, especialmente a una de mis mejores amigas: la poesía. Inducida por mi padre, enseñada por profesoras que me han apoyado a lo largo de mi vida como Belén, María Vera, Manoli y Mari Carmen Navarro y siempre me impulsaron a seguir escribiendo; compartida con personas como Mario Navajas, aprendiendo de Ana Castro o Juanma Prieto, y por supuesto, haciendo un trío con Fco. J. Vera; ella ha marcado unos antes y unos después en el transcurrir del tiempo que me ha regalado la vida.  Por todos y cada uno de ellos, por todos los poetas y poetisas que seguimos creyendo en ella.


¡FELIZ DÍA DE LA POESÍA!
Besos de versos para todos.


No somos más que una explanada de feria
desierta todo el año,
para que una vez, solamente una vez,
vengan a celebrarnos
y darnos muerte al instante.

lunes, 19 de marzo de 2012

Exotismo.

"-¿Nunca habías visto a un elefante comerse una serpiente?
-No. En mi mundo, esas cosas no ocurren.
-Creo que no tienes claro cuál es tu mundo...-sentenció." 




-Del poemario: Cosas para cocinar: Dietas Anémicas de Alma.-

miércoles, 14 de marzo de 2012

Mi metro cuadrado de felicidad.

Se que tarde o temprano tendré que pagar los intereses en el Banco "La Vida" del metro cuadrado que adquirí:
6 centímetros cuadrados de tinta renovable. No quiero hojas sueltas, ni libretas heridas; ya tengo mi piel para garabatear, mis pies para borrar y mi memoria para escribir mil historias.
40 centímetros cuadrados de manos y abrazos, a repartir en familia.
30 centímetros de tu cuerpo, repartido entre los labios y ese hueco de tu cuello donde me pasaría mil vidas soñando.
5 centímetros cuadrados para cada pestaña de cada uno de mis amigos y otros 5 más para los que ya se han ido.
12 centímetros cuadrados de una cajita de madera para guardarlo todo, junto con mis esperanzas.
20 centímetros cuadrados de alguna papelera para tirar miedos, sinsentidos y cosas a olvidar.


Todo eso en  mi metro cuadrado.

sábado, 10 de marzo de 2012

Mis manías exquisitas.

"Anda, prueba a tirar de otro hilo de la realidad." (Antonio de Pinto)


Retorno de las letras. Un poco de prosa como un desahogo interno a estos tiempos hostiles. Sigo viviendo en un estado de ánimo peligroso. Quizás me estoy haciendo algo vieja para tanto rollo sin fundamento.
Sigo en un cansancio del alma que no limpian este sol radiante al que he bajado la persiana; hacía tiempo que no le volvía la cara de una manera tan descarada. Así me doy cuenta de las cosas que no soporto.
No soporto poner una sonrisa cuando no la tengo, ni por cortesía ya. La diplomacia es mi fuerte, pero quiero empezar a dejarla a un lado. Se sorprenderán cuando no encuentren mis buenos modales en su sitio.
Odio lo cotidiano, lo que por constante está instaurado. Hay que saber renovarse o morir. No soporto lo anclado a la estación del pasado, me pone realmente enferma quién sigue tirando de historias caducas para excusarse o refugiarse en ellas. El tiempo sigue corriendo en nuestra contra.
Me dan repulsión los chantajes. Sobretodo los emocionales. 
No soporto mis nudos internos. Debería de seguir algún consejo que dejé anotado en mi disco duro y deshacer los enredos de las tripas antes de que explote y manche todo de sangre. 
Una gran verdad es que no hay dos sin tres. Pero no soporto ser la manzana de la discordia, quién rompe esquemas mentales y la cotidianidad de los demás. 
No soporto la sensación de que sobro, de estorbo.
Por encima de todo, odio la sensación de vivir una realidad que no es la que me corresponde, de que estoy en un lugar que no es el mío. De que soy una ficha de parchís perdida en un tablero de ajedrez y que no sé jugar esta partida. 


Quizá mañana tire de los pocos hilos de realidad que me quedan. 
Hoy tengo la cabeza fuera del alma y las manos lejos del corazón.



Condicional simple.


No hay nada más al horizonte.

Se cayeron los ojos
en un maremoto de incertidumbre.
Perdí las llaves del alma
en un incensario nocturno.

No hay nada aquí.
Más en el horizonte.